Introducción

“Este registro evidencia que hacer el libro significó mirar toda una cantidad de material, reconocerlo (justamente re-conocerlo, volver a conocerlo), pero no para probar que los edificios son tal como sus autores querían, no para buscar la evidencia de que las acciones tuvieron la forma prevista. Más bien parece reconocer la interacción entre sus propias acciones y el tiempo, los lugares y la gente que habita, como capaz de producir una cantidad de material imprevisible -o solo parcialmente previsible-” (1) 

El apunte se orienta a la comprensión de los modos de uso como las formas de ocupación que despliega el conjunto de habitantes de la ciudad respecto de las infraestructuras que posibilitan sus actividades. Vale referirnos a Alison & Peter Smithson y su trabajo sobre los "signos de ocupación": la forma en que se manifiesta la relación entre lo que esta conformado materialmente de una manera determinada y las potenciales, incluso imprevisibles, acciones humanas que lo afectan: con qué capacidades, a través de qué procesos y -muy especialmente- cómo se evidencian.
En nuestro medio, durante el 2001 las organizaciones sociales y movimientos piqueteros emergentes utilizaron la posición estratégica del Nuevo Puente Pueyrredón que vincula la red vial de transporte del conurbano sur con la Ciudad Autónoma de Buenos Aires como escenario de protesta y reivindicación social en el marco de una crisis económica, política y social. Por medio de cortes, manifestaciones y marchas se apropiaron de una infraestructura para evidenciar una atmósfera de desigualdad y hacer escuchar sus reclamos. La Masacre de Avellaneda, marcha reprimida donde fueron asesinados dos manifestantes a poca distancia del puente en la ex-estación Avellaneda, transformó al Nuevo Puente Pueyrredón en un símbolo de memoria, donde cada año se realiza un corte en homenaje a las víctimas.
Los modos de uso pueden ser descriptos a través de una protocolización, donde pasos sucesivos y sistemáticos permiten llevar adelante una forma específica de realizar algo. Estos procedimientos se asocian a las prácticas arquitectónicas, donde la manera de intervenir del arquitecto es en la producción de documentos mediadores e indirectos que definen el modo de realizar las cosas. La selección de documentos del apunte evidencian la apropiación de las infraestructuras, la manera más o menos determinada en la cual las infraestructuras se desdoblan, ocupan y emplean. Hace visible la implementación de procedimientos para manipular los materiales y establecer protocolos que los organizan. Por lo tanto recoge trabajos reconocibles por la forma de organizarse, que manifiesta su propio accionar desplegando sus capacidades en una manera de realizar las cosas, una práctica asociada a su condición material. Los documentos presentes funcionan como instructivos para realizar una acción, oscilando entre el poder de observación de las trazas y las huellas y su posible representación y utilización como material de proyecto, considerando especialmente su despliegue en el tiempo. Asociado al Apunte n°1 "Infraestructuras materiales", reseña distintas manera de abordar procedimientos para el trabajo sobre la forma urbana, entendiendo por morfología la interpretación, descripción y representación de las relaciones con que las configuraciones materiales, su organización y ocupación, se despliegan en el territorio. 

> ver modos de uso en Glosario de morfología.

Referencias:
(1)"The Shift" de Alison & Peter Smithson. La forma pública de un trabajo privado. Roberto Lombardi. 2001.